Tos seca:
Se habla de tos seca cuando no hay producción de moco o flema. En este caso la tos se activa por la irritación y la inflamación de las vías respiratorias superiores, causadas por virus, bacterias o sustancias irritantes. Es especialmente molesta y aparece, en general, durante los primeros días de una infección viral en la nariz y la garganta.
Tos productiva:
Se hace referencia a la tos productiva cuando hay un aumento en la producción de moco o flema. Este tipo de tos puede ser:
- Una evolución de la tos seca, cuando la inflamación de las vías respiratorias superiores provoca una producción de moco más denso y viscoso que cae de la nariz hacia la faringe, donde se estanca.
- La consecuencia de enfermedades infecciosas agudas y crónicas de las vías respiratorias inferiores que causan la producción de moco.
A continuación, algunos remedios caseros:
Jarabe de jengibre y menta
El jarabe de jengibre es un expectorante natural, que además detiene la irritabilidad y el dolor en la parte superior de la garganta. ¡Es ideal para la tos seca!
Solo es necesario utilizar: 3 cucharadas de jengibre picado, 1 cuchara de menta seca, 4 tazas de agua y 1 taza de miel.
Ajo, aceite de oliva y tomillo
El ajo es un antibiótico natural muy beneficioso. ¿Cómo se utiliza?
Para ello, se necesita: 2 cabezas de ajo, 1 taza de aceite de oliva y 2 ramas de tomillo fresco.
Vapor
Los remedios con vapor son una de las mejores opciones caseras para aliviar síntomas respiratorios como la tos seca y la congestión.
Ingredientes: ½ litro de agua, el zumo de 1 limón y 1 puñado de hojas de eucalipto.