Caramelos para la tos. La solución a tu malestar

Durante los cambios de estación, los aires acondicionados y los cambios de temperatura… pueden causar un ligero malestar de garganta o que sintamos la garganta reseca, y que aparezca acompañada de tos. ¿Cómo puedes ofrecer frescura e hidratar tu garganta y evitar estos molestos ataques de tos? Los caramelos para tos pueden aportar el bienestar que necesitas.

¿Por qué causa molestia la tos?

La tos molesta mucho, pero debemos ser conscientes de que es un mecanismo de defensa que utiliza nuestro cuerpo para expulsar aquello que ha accedido a las vías respiratorias y que puede ser dañino. Hay dos tipos de tos:

  • Tos productiva. Es la tos que viene acompañada de mucosidad. La función de la tos es despejar esta mucosidad del sistema respiratorio obstruido.
  • Tos seca. Aparece cuando no hay mucosidad y hay una reacción a cambios de clima, aire acondicionado, o exposición a una sustancia en concreto que está irritando la garganta.

¿Qué tipo de caramelos puedo tomarme para la tos?

Los caramelos pueden aportarte la calma necesaria a tu garganta, así que mejor que los tengas siempre cerca. Son los siguientes:

  • Caramelos con limón, miel y mentol. Aparte de aliviar la tos y el dolor de garganta, evita que tu garganta se irrite. El mentol es un ingrediente presente en la menta. Entre los principales beneficios de este tipo de caramelo destacan el de aclarar la garganta, descongestionar la nariz y controlar la tos. Además, el sabor a miel con un toque de limón permitirá que tu garganta se refresque.
  • Dulce con jengibre, canela y cardamomo. Algunos tipos de caramelos ocasionan ardores o no les sientan bien a algunas personas, por los cítricos que puedan contener. Caramelos con ingredientes como cardamomo, jengibre, canela, clavo, pimienta y pimiento ají te aportarán frescura a la garganta y no afectarán tu estómago.
  • Caramelos de limón. Son ideales para la tos seca.
  • Otro tipo de caramelos para tos serían los enriquecidos con vitamina D, C y bayas de saúco. Refrescan la garganta, y además aporta estas vitaminas tan esenciales para tu organismo. Los caramelos para tos con sabor a moras, por ejemplo, pueden calmar tu tos e hidratar la garganta.

Caramelos para tos caseros

Aunque existen varios tipos de caramelos, hay quién siente curiosidad por prepararlos en casa. Los caramelos de miel y limón son los más conocidos. El limón es una fuente de fibra, vitamina C, flavonoides y ácidos orgánicos. Y la miel es un alimento con muchos nutrientes que colaboran para que se combata la tos de forma natural. Es una fuente natural de vitaminas B, C, D y E, además de minerales como cobre, calcio, hierro, zinc, magnesio, potasio y fósforo. Permite la relajación nocturna y además es un antiséptico natural que junto con el limón aporta una solución expectorante para combatir la tos.

  • Caramelo de miel. En una cazuela a fuego bajo pon 200 g de miel, el jugo de un limón y una cucharada (19 g) de jengibre en polvo. Con la ayuda de una batidora de mano lo puedes mezclar mientras va aumentando la temperatura. Cuando aparezca espuma en la superficie, baja el fuego y sigue mezclando hasta que llegue a los 150 o 155º de temperatura. Después puedes colocar unas gotas de la mezcla en un vaso con agua helada y verás que se forma una bola dura, significa que ya está listo. Si ves que no es así, remueve unos minutos más. A continuación deja enfriar la mezcla y viértela en moldes para caramelos. Una vez enfriado, retira las pastillas y rocíalas con 100 g de azúcar blanco hasta cubrirlas por completo. Guarda los caramelos en la nevera.
  • Caramelos para tos de amapola. Los pétalos de esta planta contienen alcaloides y mucílagos, y les confieren propiedades antitusivas y sedantes. Es por este motivo, que los caramelos de amapola son ideales para tos seca y tos nerviosa. Su ácido cítrico estimula la producción de saliva que te ayudará a cortar ese ataque de tos tan molesto. Calienta el horno a 250º, cuando está a esta temperatura lo apagas e introduces los pétalos de amapola durante una hora para que queden secos. Introduce en una cazuela, y a fuego lento, un sobre de gelatina neutra, gelatina de sabor limón, 100 ml de agua o jugo de limón, 150 g de azúcar, y una cucharadita de ácido cítrico. Remueve la mezcla sin parar durante 10 minutos. Es importante que no hierva, así los ingredientes no pierden ninguna propiedad. Cuando lo saques del fuego lo puedes colar. En una cubierta de silicona cubres con aceite y lo llenas de toda la mezcla. Déjalo reposar durante 12 horas. Luego desmolda y reboza con azúcar –al que se tiene que haber añadido una cucharadita de ácido cítrico–. Tómalo durante máximo tres días. Queremos explicarte que los alcaloides que contiene la amapola, aunque tenga dosis muy bajas, es contraindicada para embarazadas, madres lactantes y niños.
  • Caramelo de menta junto con jugo de limón. Pon caramelos de menta y el jugo de limón en una cacerola pequeña y caliente, espera a que los caramelos se disuelvan. Añade miel y mezcla bien. Toma una o dos cucharadas de esta mezcla según lo necesites.
  • Caramelos de miel, limón, jengibre y clavo molido. Otro tipo de caramelo para tos sería éste. Pon en una cazuela 110 ml de agua y 150 ml de azúcar. Remueve un poco y añade una cucharada sopera de zumo de limón, una cucharada también sopera de miel, media cucharada de jengibre y un cuarto de cucharada pequeña de clavo. Una vez empieza a hervir, baja el fuego y tenlo en ebullición durante unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando. Apaga el fuego y déjalo enfriar un poco para no quemarte. Luego pon la mezcla en un molde de silicona del tipo que se utiliza para bombones. Si no tienes ningún molde de estas características hornea con una cuchara pequeña, deposítalo encima del papel haciendo unas formas redondas. Cuando esté frío desmolda los caramelos y ya los tienes listos para comer.
  • Caramelos para tos de coco y canela. No es un sabor muy común en los caramelos para tos, pero es útil para la garganta. Incluso para la prevención. Vierte en un bol 100 ml de aceite de coco y móntalo hasta que obtengas un líquido ligero y espumoso. Añade 100 g de miel, y mézclalo hasta que quede homogéneo. A continuación, ve añadiendo la canela según tus gustos, y remuévelo. Coge una bandeja para cubitos de hielo o bombones y vierte la mezcla. A continuación lo pones al congelador durante al menos media hora para que se solidifique. Extrae los caramelos del molde y consérvalos en un lugar donde no se puedan derretir hasta que los consumáis todos.

Es aconsejable que tomes tres o cuatro caramelos para tos al día, cuando te venga el ataque.

Toma caramelos con moderación

Dado que normalmente los caramelos tienen un alto contenido de azúcar, es recomendable consumirlos con moderación. Y recuerda que no pueden sustituir un tratamiento indicado por un médico. Más bien, es un complemento para obtener alivio a la persona que sufre tos. Si no te gustasen los caramelos para tos, existen otros remedios que pueden ayudarte a aliviarla.

Puedes prevenir la tos…

Manteniendo un buen sistema inmunológico. ¿Cómo? Adoptando hábitos de vida saludables, asegurándote de dormir lo suficiente, comer frutas y verduras, consumir alimentos y suplementos de vitamina D, ya que esta vitamina es esencial para la función inmunológica. 

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